Vanilla Kush fue creada a partir de una índica afgana de rápida floración cruzada con una cepa de semillas Kashmiri que recogimos en la región de Cachemira a mediados de los ’80. La planta Kashmir es única por sus inusuales aromas a vainilla y su gran capacidad de producir hachís. Ésta Vanilla Kush une la fuerza de las mejores genéticas afganas con los aromas de alta montaña del valle de Cachemira. Con frondosas ramas laterales, Vanilla Kush produce generosas cosechas, dando forma a densas y hermosas puntas cubiertas por sépalos rojos y dorados. Las flores  bien curadas se convierten en cogollos muy bonitos a la vista, con cierto aroma a vainilla salvaje y pino, y el efecto al consumirla es fuerte y duradero a la par que relajante.